Mi 1-O

  • Por fin. He vuelto a coger el hábito de lectura que creía semi-perdido, no sé por qué últimamente mi concentración fallaba. Recientemente he terminado dos libros bastante interesantes con cierta rapidez, uno de ellos es «Salinger», biografía de el misterioso autor de «El guardián entre el centeno» a cargo de David Shields y Shane Salerno; el otro es «Lolito» de Ben Brooks. Puedo decir que me han provocado reacciones contrapuestas, mientras el primero me atraía enormemente dada mi afición a las biografías he acabado algo decepcionado, no sé si es el momento que me ha pillado o el enfoque utilizado por los autores pero lo acabé sin que me quedase poso alguno, cosa inesperada dado el halo de misterio que siempre envolvió la figura del misterioso J.D. Salinger; sin embargo posteriormente llegué a «Lolito» sin juicio alguno preconcebido y me ha flipado. Ben Brooks es uno de los escritores favoritos de Nick Cave y es bastante bestia, como cabía suponer, pero al mismo tiempo divertidísimo. Un adolescente descubre la infidelidad de su novia vía Facebook y a partir de ahí comienza una relación perturbadora en internet con una mujer mucho años mayor que él y… ya no cuento más, ya el título «Lolito» (referencia nada oculta al «Lolita» de Nabokov) promete, ¿verdad?
  • Precisamente Nick Cave es un gran músico bastante incorrecto. Esto viene a cuenta del grado de demencia al que estamos llegando en los últimos años con este tema de lo «políticamente correcto» y que ha llevado a vetar canciones de Radio Futura, La Unión o Loquillo en La Sementera de Torrijos (Toledo), noticia que me pasó por whatsapp mi amigo Pablo Ruiz «Toperita». La verdad es que el asunto ya me causa estupor: ¿machista la letra de «Corazón de tiza»? Dios, la frase de «si te vuelvo a ver pintar un corazón de tiza en la pared / te voy a dar una paliza por haber escrito mi nombre dentro» está puesta en boca de un crío y particularmente me parece deliciosa, prohibamos entonces también el tango, buena parte del flamenco y de la música latina, ¿no? Recuerdo una tertulia en la que participé junto a Sabino Méndez en la que él defendió con ardor la letra de su canción «La mataré» (interpretada por Loquillo y Trogloditas), ¿cómo va a tratarse de una apología al maltrato femenino? «Un insulto a la inteligencia», decía Sabino con todo convencimiento. Realmente, sí, hay que ser muy cortito para no pillar que el vocalista cantaba en boca de otra persona y que la letra intenta reflejar como funciona la mente de un matador de mujeres. «Murder ballads» es un disco del mentado Nick Cave íntegramente dedicado a canciones sobre crímenes pasionales, y que yo sepa nadie por ahí le ha acusado de loco violento.
  • Lo correcto suele ser acomodaticio y por tanto, un muermo. Nada de eso es el gran Diego Santos, uno de los artistas totales más grandes que ha dado la ciudad de Málaga. Lo conocí en los 80 como pintor, su actividad más importante, suyos son esos trazos grisáceos que completan la portada de «Maratón» de Danza Invisible. Como loco iluminado que siempre ha sido, empezó de lleno a meterse en la aventura de reivindicar la arquitectura turística de la Costa del Sol de los 50-60, esfuerzo que llevó a cabo conjuntamente con Juan Antonio Ramírez en 1987 y que dio como resultado el tratado «El estilo del relax», imprescindible manifiesto que hoy día es estudiado en las escuelas de arquitectura y que consiguió que algunos edificios emblemáticos se salvasen del derribo al ser declarados como protegidos. Es un antecedente clarísimo de la página «Torremolinos Chic», otro esfuerzo encomiable que ya no parece una frivolidad de modernos de pacotilla. Vi a Diego en la presentación del libro de Litoral sobre Torremolinos y seguía igual, hecho un dandy y vestido impecablemente con colores chillones. Allí estaba el tío, proponiéndole al alcalde «tunear» el espantoso Museo Histórico de Torremolinos -que aún permanece cerrado y costando una pasta al municipio- con neones y excentricidades salidas de su imaginación desbordante. Si algún día deciden hospedarse en el Hotel Larios de mi querida ciudad podrán comprobar el talento de mi amigo, al que no veo todo lo que desearía, suya es esa decoración deliciosa tipo «Love Boat».

 

P.D.: Espantado ante lo que sucede hoy en Cataluña, miro en las páginas de eldiario.es y veo en pequeñito otra noticia que me sobrecoge aún más, la triste situación de Linares, el pueblo de mis padres. En una población de 58.000 habitantes, hace unas semanas se movilizaron más de 30.000 personas pidiendo soluciones al paro salvaje que les estrangula, ¡más de la mitad del pueblo! Me temo que su manifestación, también completamente pacífica, distará muchísimo de ser atendida como se merece. ¡País!