Torre del Mar empezó a recibir este miércoles a la mayoría de los 45.000 weekers que se esperan en la quinta edición de una cita que, por primera vez, dispondrá de un punto violeta con información preventiva que permita la erradicación de cualquier forma de violencia sexual
Foto 1: Por un Weekend sin agresiones
Foto 2: Los «weekers» se preparan para ver días y, sobre todo, noches muy intensas de música.
Sin las colas de otros años en las horas previas la inicio de la Fiesta de Bienvenida, pero con un mayor número de asistentes al festival. Así se vivió el arranque de la quinta edición del Weekend Beach Festival. Desde las doce del mediodía y con un viento que deslució la primera jornada de playa, la mayoría del os 45.000 weekers que se esperan para este año comenzaron a ocupar espacios de acampada, restaurantes y zonas de baño.
La principal novedad en la víspera de un acontecimiento que ya traspasa las fronteras españolas es en esta ocasión la extrema vigilancia que se tendrá sobre cualquier tipo de agresión sexual. Lo remarcaron agentes policiales de ambos sexos que, con indumentaria más propia de un weeker, también tomaron posiciones desde primera hora a pie de escenario. El objetivo no es otro que el de evitar episodios que en otras fiestas han terminado con denuncias y procesos judiciales de sobra conocidos.
El Ayuntamiento de Vélez Málaga, de hecho, al objeto de contribuir a erradicar cualquier forma de agresión sexual y de prevenirla, instaló ayer un punto violeta que supone un antes y un después para un evento de estas características.
La edil delegada de Bienestar Social e Igualdad, la socialista Zoila Martín, informó de las diferentes iniciativas que se llevarán a cabo desde los Servicios Sociales Comunitarios en los próximos días. De hecho, incluso se han repartido entradas a jóvenes en riesgo de exclusión social. O se han instalado «puntos de atención a la movida» para concienciar sobre los riesgos derivados del consumo de alcohol y drogas.
En términos estrictamente musicales, la primera jornada deparó el triunfo ante sus paisanos de los ya legendarios Danza Invisible. A las diez de la noche, nada más superado el ocaso, Javier Ojeda y el resto de integrantes del grupo torremolinense demostraron su extraordinario momento de forma y el principal motivo por el que en estos tiempos baten máximos históricos de conciertos por temporada. «Ni en nuestros mejor época tuvimos tanta actividad», confesaba el intérprete.
Hasta el recinto de conciertos, además de los miles de weekers que utilizaron otros transportes privados o colectivos, llegaron durante la mañana más de media docena de autobuses. Eran las expediciones organizadas desde ciudades como Madrid, Bilbao, Burgos, Vitoria, Sevilla, Huelva, Granada o Jaén. Tras la fiesta de la víspera, todos disfrutarán hoy con el rotundo directo de los estadounidenses The Offspring, uno de los platos fuertes del cartel de esta quinta edición. Pero también serán hoy protagonistas The Toy Dolls, Gatillazo, Boikot, Inner Circle, La Raíz, Juanito Makandé y Muchachito, Viva Suecia o Whe the Lion.
(Fran Extremera para La Opinión de Málaga).
