Como un extraordinario disco de los Temptations, «All directions». Así se puede catalogar mi actividad del mes de octubre, variadísima y muy interesante desde el punto de vista artístico. Ahí va a modo de diario una semblanza de estos últimos 31 días, preparaos para leer que hay mucho que contar.
El mes comenzó con una de las colaboraciones en directo más chulas que he hecho, un dúo sorpresa con el gran Toni Zenet en el Teatro Echegaray de Málaga. Me atrevo a decir que «Entre tu balcón y mi ventana» quedó genial, divertida y bacilona a lo Frank Sinatra & Dean Martin -yo hacía de Dean-. Si os gusta Zenet, no os lo perdáis en directo; si «Los mares de China» no os acaba de convencer esperad a verlo en directo: es ARTISTA de verdad, sabe improvisar, tiene un talento especial para dirigir un show. Toni se apunta a colaborar en mi nuevo álbum, a ver qué canción le doy, fantástica noticia.
El día 5 grabé mi primer dueto por internet. Se trata de la canción «Seremos cómplices», a incluirse en el disco del 25 aniversario del dúo Complices. Esto me ha encantado también porque Teo y María son amigos de hace tiempo y me han cedido uno de sus principales éxitos, todavía no he escuchado el resultado porque la he grabado entera y les he dejado a ellos el montaje, sólo puedo deciros que Teo dice que ha quedado fantástica. Bueno, creo que se edita el disco este mismo mes, así que pronto podréis juzgar. Al día siguiente vuelvo a cantar en un disco ajeno: el tema «Contar conmigo» es una fantástica canción de los malagueños Motel Caimán, antiguos Caimanes. No por menos conocidos me ha hecho menos ilusión, faltaría más, la melodía es emotiva y parece que en breve vamos a hacer un video-clip. Muy, pero que muy recomendable.
El 7 y el 9 hemos hecho dos actuaciones acústicas que han sido como bajar del cielo al infierno. La del Cervantes fue lo más, el marco es incomparable para un acústico, el sonido fue estupendo y los de Cudeca quedaron encantados de nuestra participación en el concierto benéfico. También estuvieron Efecto Mariposa, entre otros, con los que inevitablemente interpreté «No me crees». Fiesta final y satisfacción de la grande. En cambio lo del 9 fue un pequeño martirio, quieras que no tocar en acústico en una caseta de feria con el chin-pun de la caseta de bakalao sonando al lado no es lo más adecudo para entrar en ambiente. Como uno es profesional, hicimos de tripas corazón y conseguimos sacar adelante un show de esos de alto riesgo…
…Y de pronto me planto en la Plaza del Pilar (Zaragoza) con Danza Invisible, ante cualquier barbaridad de personas (¿30.000, 40.000?). Otra vez acompañados de Efecto Mariposa, hicimos una actuación llena de energía en la que, ay, nos faltó el engrase de cuando tocamos muy seguido. Me quedo con la sensación de la ligera decepción que produce el comprobar que la mayor parte del público no conoce los temas de «Tía Lucía», del que interpretamos unos 8 temas. Y también con la constatación de que Edy Plúmed (con el acento en la ú) es el único de mis amigos zaragozanos que no está como una cabra. ¡Estos mañicos!
Lo que no me gustado gran cosa ha sido nuestra participación en el tributo a Héroes del Silencio. Entiéndaseme, no me importa intervenir en absoluto, todos sabéis que tengo una buena relación con Bunbury, y Joaquín Cardiel tocó en mi «Polo Sur»; lo que no me hace tanta gracia es que te den sólo 4 días para hacer la versión y que forzosamente sea de «Mar adentro», tema que nunca me ha gustado, la verdad. Por tanto, no podemos escoger el tema ni prácticamente la manera de hacerlo, con ese tiempo sólo se puede hacer algo en acústico, el grabar la batería ya hubiese implicado más días con los que no contábamos. En fin, por decirlo de una manera amable lo he grabado contra mi voluntad, lo que no implica que no lo haya hecho lo mejor que he podido. En Danza Invisible uno acata lo que dice la mayoría y eso no quiere decir que no pueda estar equivocado, no sería la primera vez. A Miguel Paredes, que nos ha echado un cable mezclando, le gusta como ha quedado, por ejemplo. A ver qué opináis vosotros.
Creo que fue el jueves 14 cuando oficié de presentador en la puesta de largo de El Trío del Saco y Mama Kin, dos veteranas bandas malagueñas que se unieron para financiarse conjuntamente la grabación de sus respectivos CD’s. Es una idea magnífica, el Cine Albéniz se petó, las dos actuaciones se filmaron en DVD y yo estuve allí de invitado cantando «Play that funky music – La danza de la marea». Me siento pleno de haber puesto mi granito de arena para un evento tan bonito, qué buena gente son todos. Ah, por si alguien no lo sabe, el Trío del Saco es el grupo de nuestro Miguelo Batún, el batería actual de Danza. Si no pillásteis su CD, y el de Mama Kin, aprestáos a hacerlo, tienen los dos pero que muy buena pinta, entre el blues, el rock y el soul.
Más cosas para el recuerdo: la presentación del número especial de «Litoral» sobre el Rock Español en el Centro Cultural de Ollerías. En este estudio sobre la poesía en el rock nacional colaboro yo con uno de esos textos tan a mi manera, pero lo mejor de todo fue que, con la presencia de Sabino Méndez (ex-compositor de Loquillo y Togloditas) y Kiko Veneno, lo que empezó como un simple presentación agradable y tal se convirtío, por mor de la increíble predisposición de Kiko, en una mini-actuación improvisada de muchísimos quilates. Yo hice «Cadillac solitario» con el bueno de Sabino, también canturreé el «Lobo López» con Kiko, y ambos se unieron para acompañarme con sus guitarras en «A este lado de la carretera». ¿no es para volar? Eh, al final me salió un quejío mu bonito en «Dice la gente», el nuevo single de Kiko, ¿irá en serio eso que me propuso del proyecto conjunto de Dylan en español? Una velada inolvidable, se mire por donde se mire.
Hablando de veladas inolvidables, la del día siguiente en Montilla, casi ya mi pueblo de adopción. Fui a presentar -una vez más- «Una historia del pop malagueño», dado que la idea se gestó allí y Manolo Bellido, el responsable de la parte de Danza Invisible, es montillano. Con una banda de músicos amigos tocando temas clásicos malagueños, hice lo habitual en mí cuando se me calientan los morros: subirme al escenario, una preciosa iglesia situada en el centro de la localidad, y arrancarme a cantar lo que se terciase. Vaya si he hecho amigos allí, dicen que van a fletar un autobús para los conciertos del 27 y 28 y todo. Gracias a TODOS, sois gente grande.
¿Algo más? Pues sí, un par de mini-acústicos para la radio. El primero en «Hoy por hoy», para la SER local, acompañado de Paula Gaviño, y la del pasado viernes con ella y Manolo Danza, para «La ventana» de Gemma Nierga. Nos trataron de maravilla, por cierto, y la gente se rió mucho con «mis paridas», como dice Paula.
Me despido con dos recomendaciones: una la del próximo 5 de noviembre, día en el que nuestro ex-compañero de los tiempos de Danza, Ricardo Texidó, presenta sus nuevas canciones. La saga Invisible sigue dando frutos, afortunadamente, y sin haber escuchado lo nuevo de Ricardo me atrevo a decir que debe estar muy bien. Se ha acompañado de músicos muy imaginativos, destacando la presencia de Conde e Isra (de Santos de Goma), y está con muchísimas ganas. Tiene mucho mérito el empuje que él y su pareja Cristina están dando a la música malagueña con su nuevo sello Antena Music, una de estas iniciativas necesarias.
Y la segunda, claro está…. ¡EL ESPECTÁCULO «REVERSOS»! Tras los primeros ensayos estoy como un niño con zapatos nuevos, vaya discazo que vamos a hacer. Me parece que al final van a caer de 8 a 10 temas en directo para el CD, más de lo que pensaba. Insisto: no os lo perdáis, el evento va a ser filmado por mi gran amigo Jorge Agó para la posteridad, con vistas a hacer un DVD o lo que sea, el teatro es pequeñito y ahí puedes aparecer tú… Las entradas ya están a la venta, no os vayáis a quedar sin ellas. Un abrazo enorme.