El legendario MC de Huelin regresa al panorama con un disco cargado de madurez, profundidad y culminación artística en su retrato más rotundo
Hace trece años, el viernes también trece, pero de agosto, nuestro querido Javier Ojeda pronunció la frase «necesitamos más músicos como Gordo Master», durante su memorable pregón de la Feria. El pasado viernes, rozando el Día de Todos los Santos, Andrés Duarte lanzó al mercado su último trabajo hasta la fecha: Una Sola X. Sí, los viernes y los trece parecen sentarle de miedo.
El álbum, hospedado por el sello discográfico ACE Music, se compone de diecisiete canciones, todas producidas por Jul Beats —quien también se encargó este verano del celebrado remix de ‘Málaga City’— con ‘scratches’ y arreglos de Jose Rodríguez, asegurando un LP compacto y sólido. Tanto como ya refleja la portada del mismo, diseñada por Adolfo Guerrero, mostrando una enorme ‘X’ que se impone y resiste en un paisaje urbano devastado, flanqueada por otras dos más pequeñas, derrotadas por el fuego de la catástrofe. Nada que envidiar a Jerry Bruckheimer o Michael Bay: hierro, fuego, acción. Así pues, el simbolismo y la reivindicación quedan bien claros. Como si de Los Inmortales se tratase: sólo puede quedar uno. (…)
(Sebastián Arteaga para Diario Sur).
