El secreto de la felicidad funky en Torremolinos

  • Un festival trae a George McCrae, cantante del hit ‘Rock your baby’
  • Más de 2.000 personas acuden a la plaza de La Nogalera, donde Javier Ojeda ejerció de maestro de ceremonias

Dice George McCrae que el funky «es una explosión de felicidad». Quizá esa dicha sea el resorte fascinante que impulsa al septuagenario cantante estadounidense a seguir agitándose al ritmo de su ‘Rock your baby’ más de cuatro décadas después de dinamitar las listas de éxito de medio mundo. Torremolinos bailó ayer los temas más populares del mítico vocalista nacido en Palm Beach con motivo de la primera edición del Funky Town, un festival nacido con vocación de futuro que congregó a más de 2.000 personas. No había mejor escenario posible que la plaza de La Nogalera, la excepción andaluza más colorida durante los años grises del franquismo. «Torremolinos fue pionera de la música disco», reivindica Javier Ojeda, convertido en maestro de ceremonias oficial de la reactivación cultural del municipio costero.

Ojeda llevaba meses supervisando la programación del festival, para el que creó una banda propia: Málaga Funk All Stars. El líder de Danza Invisible fue el otro gran reclamo de una noche que acabó siendo un gran homenaje a este estilo, que se coló en las pistas de baile a comienzos de los sesenta y que adquirió su mayor cota de popularidad con la irrupción de James Brown. El objetivo de Ojeda quedó claro desde el comienzo de su actuación. «El funky es algo divertido, jocoso, loco, que entronca con Torremolinos», explicó el cantante malagueño, que desgranó algunos de los temas más emblemáticos de la era disco. El público, que no paró de bailar durante las más de seis horas que duró el festival, demostró estar entregado desde que apareció en escena el dj Miguel Ángel Sutil, encargado de inaugurar la cita.

Para Ojeda no era una noche cualquiera, y no sólo por su implicación en la organización del festival. Hacía poco más de un año que La Nogalera había sido escenario del regreso de Danza Invisible a Torremolinos después de más de doce años sin actuar en la localidad que los vio nacer. Aunque con otra banda, el cantante malagueño recordó aquel momento como «uno de los más emocionantes de su carrera». El rapero Gordo Máster, Irene Lombard, Julia Martín y Suzette Moncrief completaron el cartel de la noche, que se prolongó hasta la madrugada.

 

 

McCrae, que llegó a Torremolinos el miércoles, se declaró «un enamorado» de la Costa del Sol y de los espetos: «Casi me como hasta la espina». El vocalista de éxitos como ‘I get lifted’, ‘Its been so long’ o ‘Look at you’, alcanzó el número uno de ventas de más de una decena de países, entre ellos Estados Unidos, en los setenta. Ayer Torremolinos, testigo de su incombustible pasión por los escenarios, supo por qué. «Quiero regresar para dar un concierto completo», dijo antes de despedirse sin evitar un juego de palabras con el título de su último disco, ‘Love’, que desveló el secreto de este estilo gozoso que ayer impregnó La Nogalera. «Soy un embajador del amor, porque el funky no es más que eso: amor». Y felicidad.

 

(Reportaje de Alberto Gómez para Diario Sur).