El cantante actuó en Noia en el marco de los actos por el aniversario del Liceo
Había mucha expectación en torno al concierto de Javier Ojeda en Noia -como muestra el hecho de que el público se agolpase a las puertas del Liceo antes de su apertura-, y el líder de la mítica banda Danza Invisible no defraudó ni a propios ni a extraños con un espectáculo con el que brindó a un público entregado un viaje a la década de los 80 a través de sus canciones.
Su presencia en Noia se enmarcaba en los actos para conmemorar los 96 años de trayectoria del Liceo. Era sin duda el plato fuerte del fin de semana, y el público noiés respondió con entusiasmo coreando los grandes éxitos popularizados por Ojeda y su banda.
(Marcos Creo para La Voz de Galicia).