Pregón de la Feria del Rincón de la Victoria 2012

Aunque improvisó un montón en su discurso, incluso más de lo habitual, aquí tenéis el pregón «oficial» de la Feria del Rincón de la Victoria que JO promulgó el pasado 12 de julio antes de arrancarse con algunas melodías.

Buenas noches a todos, sr. Alcalde, concejales, vecinos y vecinas del Rincón y antes que nada un millón de gracias por la distinción de que me habéis hecho objeto.  No quepo en mí de orgullo y gozo por estar dando pistoletazo de salida a vuestra fiesta mayor, hecho que además coincide con el 30º aniversario de mi entrada en la música como vocalista de Danza Invisible. Treinta años ya, quien lo iba a decir. Todavía me parece increíble que lo que comenzó como un sueño adolescente haya acabado siendo mi profesión y que haya podido estirarla tantísimo, y a tenor del número de galas y la actividad incesante de los últimos años esto tiene visos de postergarse por mucho pero que mucho tiempo. Definitivamente, estoy muy contento y he de decir que al contrario de otros vocalistas o artistas variados yo sí soy amante de las distinciones y los reconocimientos, cosa que espero que no se confunda con vanidad, Dios me libre. ¿Puede haber algo más bonito que la gente reconozca tu trabajo? A mí me parece que no.

Pues aquí me encuentro tras tres décadas de oficio como pregonero de la feria del Rincón, uno de mis municipios más queridos y donde más tiempo he pasado. Si mal no recuerdo, la primera vez que actué aquí con Danza Invisible fue en la mítica discoteca Yo, allá por el 86 o 87, y ya entonces para mí este municipio tenía esa magia especial de la conjunción de montaña y mar,  guiris y lugareños, pescador de la Cala y agricultor de Benagalbón, como también la tiene esta feria celebrada en honor de la virgen del Carmen aunque la patrona del Rincón sea la virgen de la Victoria. Un sitio heterogéneo y precisamente por eso rabiosamente malagueño. Tremendamente turístico, sí, pero con un turismo radicalmente distinto del de Torremolinos, Marbella y en general toda la costa occidental malagueña. Hasta el propio nombre del “Rincón de la Victoria” siempre me llevaba, en mi confusión adolescente, a conceptos llenos de tipismo como los boquerones vitorianos o la cerveza Victoria, cómo no. ¿El rincón de los boquerones y la cerveza? Tómenselo a broma o no, pero creo que es combinación imbatible.

 

Con el paso de los años veo como mis pasos me van acercando más y más hacia esta zona y no solo porque todo malagueño tenga algo de rinconero. De hecho, mi hermana estuvo residiendo en La Cala del Moral durante unos 5 años y mis visitas eran frecuentes, como también lo son las reuniones en casa de mi amigo Fredy, todo quesos, vinos y patés. Además estuve tocando hace unos tres años con Danza Invisible en Benagalbón, concierto de grato recuerdo como lo fue el de la Cueva del Tesoro, acompañando a la Free Soul Band. Por cierto, otra combinación mágica la de música eléctrica y escenario natural alucinante, una de las experiencias más bonitas de mi carrera. Pero es que sin ir más lejos el año pasado os visité en concierto en 4 ocasiones, nada menos, teniendo el orgullo de repetir en dos ocasiones en un conocido bar-restaurante en donde me trataron de auténtico lujo y donde cada velada era distinta e igual de íntima. Me parece que los japoneses llaman feng-chui a esa disposición ordenada de las cosas que hace que te encuentres a gusto en un lugar o no; ¡pues bien, aquí hay feng-chui, señoras y caballeros!

Como estuve comentando a las autoridades municipales el día de la presentación, tenemos aquí todavía un paraíso natural del que creo no todos somos conscientes. No hay cosa más elevadora del espíritu que recorrer la distancia que separa Málaga capital de vuestro municipio en moto o, mucho mejor, en bicicleta, mientras la brisa del mar te acaricia el rostro y el aroma de los espetos se confunde con el ruido de las olas. Es una actividad a la que cada vez me dedico con mayor profusión y que me sirve de inspiración para la música y la vida en general, ¿cuántas canciones tengo con referencias al mar? A ver, algunas que me viene a la mente: “Agua sin sueño”, “Cintura de arena”, “El vaivén de las olas”, “Diez razones para vivir”, “Olas del mar”. ¡Pero si hasta en la archiconocida “Sabor de amor” se emplean terminos marítimos como mejillones o espuma del mar! Es de recordar que este paraíso es nuestro y todavía lo tenemos aquí y no hay crisis ni rescates que nos lo arrebaten, y es bueno recordarlo en tiempos de crispación de un país que en estos momentos está lleno de dudas. Por eso es de agradecer el enorme esfuerzo que está llevando a cabo la administración y todos los implicados en la organización de esta feria que ahora se muestra más necesaria que nunca.

 

Ya voy a terminar esta introducción dándoos una vez más las gracias por este reconocimiento que, como no, también hago extensible a mis compañeros de Danza Invisible, grandes músicos y mejores personas con los que ayer mismo andábamos incendiendo las calles de Pamplona. Noble municipio del Rincón de la Victoria, os queremos un montón y no sé como devolveros este detalle tan bonito que habéis tenido conmigo. O ahora que lo pienso, sí que lo sé: exprimiéndome en cada actuación que haga cada vez que visite cualquiera de vuestros rincones con la cercanía de una refrescante cerveza, sea o no victoria.