Resulta que hace poco a Gema le saltó en una de sus playlist la canción «Noche callada», incluida en el álbum DeCantando y me preguntó por ella. «Esta canción es preciosa y no la recordaba, ¿en qué disco está?». Esto me hizo en parte reconsiderar la decisión que tenía tomada de publicar un par de temas nuevos para este mes, ya que me doy cuenta de que muy posiblemente tengo un montón de canciones muy válidas que no he explotado lo suficiente. A ver, creo que he editado casi 230 temas distintos, más buenos o más malos, y seguramente hay unos treinta y tantos más o menos «famosos», seguro que tirando de ellos puedo estar varios años sin renovar apenas repertorio en directo sin que a nadie le parezca mal. De hecho hay varios compañeros de generación que llevan más de una década sin cambiar una coma del show. Pero ay…
Yo no soy así. hay algo en mi personalidad que me impele a no repetirme, a veces soy muy exagerado con esto, lo reconozco. Pero claro, me pongo a pensar y pienso que hay un montón de piezas que pienso que no he tocadoado lo suficiente en directo, yo qué sé, un tema tan bonito como «Libro abierto», cosas del álbum Efectos Personales como «Las ruedas» o «Lo que dicen por ahí», del mismo DeCantando siento que «La marca» y «Un brindis tú y yo» son chulísimas, también de Polo Sur me apetece rescatar «Cintura de arena», o «Sin ti». Por no hablar ya de rarezas de las que que me siento orgulloso como «Corazón acorazado», «Qué vas a hacer conmigo» o «Las noches del Camagüey». ¡Y hasta de Contacto Interior me apetece volver a tocar «El legado» o «Arco iris»!
Claro, no todo esto es factible. Me temo que arriesgar tanto me llevaría a ser mucho menos requerido para las contrataciones y me quedaría sin hacer esto que tanto amo, tocar en directo. Y en mis días tristes pienso que no hay una auténtica demanda de material nuevo por mi parte. Posiblemente si viniese firmado por Danza Invisible sí, pero me temo que eso es imposible y desde hace muchísimo tiempo, snif. Aprovecho para contaros que los Danza están bien, Manolo retirado completamente de la música, Chris encerrado con el bajo intentando sacar un proyecto propio y Antonio, con el que hablé hace apenas tres días, felizmente jubilado y tocando de vez en cuando con su amigo el guitarrista Juan Campos por el puro placer de tocar.
¿Y entonces? Pues eso sí, para noviembre sí que voy a sacar algo. ¿Y sabéis por qué? Porque aunque sepa que realmente no me hace falta alguna, ¡qué feliz soy componiendo, grabando, versionando temas, publicando! Esos instantes de gozo valen por todo, amig@s. Os veo en los conciertos. Intentando llevar un repertorio asequible, con muchos de los éxitos inevitables, pero no previsible, ya veréis.